"El pozo del tio Raimundo"

por Beny

The Adversiter Chronicle tiene el privilegio y el placer para sus lectores de contar con una nueva firma colaboradora: Beny.
Una pluma que no dejará a nadie indiferente y al que podéis enviarle preguntas o comentarios a la dirección habitual: theadversiterchronicle@hotmail.es
Beny, la mirada de un igual tachado de diferente por sus semejantes y al que el Sistema quisiera tener callado e invisible…

jueves, 28 de febrero de 2013

"El pozo del tío Raimundo", por Beny

 
Una sección de Beny en exclusiva para The Adversiter Chronicle

 
 
Rincón de Beny
De pequeño con 5 años era muy rebelde, por ejemplo me escapaba de los campos donde estaba trabajando mi familia…
Y me iba al pueblo a jugar con los otros niños, pero todo esto sin darme cuenta; a los ocho años nos fuimos a Madrid a vivir a Carabanchel, la colonia San Francisco… Tengo que mi padre me pegaba por desobediente. Estando en una excursión del colegio Ángel de la Guarda me buscaron tanto que me encontraron…
Me fui y me perdí… y me encontraron.
 
Con catorce años salí del colegio y dos años después me fui a la Escuela de Hostelería y aprendí…
Me gustaba mucho la cocina y comer buena comida. A los dieciocho años me metí en la cocaína y el alcohol y me fui a la Legión, estuve dos años como legionario, pero tuve un problema: los homosexuales y los borrachos se metían conmigo de tal manera que me vi obligado a desertar…
Estuve una pequeña temporada vagando como desertor de la Legión por Marruecos y me cogió la policía marroquí y me llevaron a la Guardia Civil, pero se hartaron de mí y me metieron en una habitación llena de caca y había una caca venenosa pero no me mordió…
Me llevaron al pelotón de castigo y me pegaron pero no me maltrataron y trabajaba mucho y más tarde me trasladaron al Castillo de Mª Cristina y a los tres meses de estar allí y por trabajador los presos me pegaron una paliza… y estuve 20 días bajo tierra con un testigo de Jehová pero se me rajó y a la semana tenía miedo y lo subieron y yo estuve 20 días tan tranquilo, con mi colchón con dos mantas y luego me hicieron del comedor y me dieron una celda con buen gusto y me presentaron a un albañil y nos pusimos a trabajar en el foso del Castillo y seis meses después me dieron el indulto.
Beny
 
 
 

martes, 12 de marzo de 2013

"El pozo del tío Raimundo", por Beny

 
 
Una sección de Beny en exclusiva para The Adversiter Chronicle
 
El rincón de Beny (Vol. II)
 
Me colé en un barco de frutas variadas y hablé con un marinero y me dijo que me podía quedar en la cocina para salir adelante…
 
El barco iba camino de las Baleares y me hice con buenos amigos, camareros y también con los que llevaban el barco y su maquinaria. Me duchaba todos los días al levantarme y al acostarme.
Nos seguía el buen tiempo durante el viaje y sin ningún problema en la travesía. Salimos por la mañana y llegamos por la tarde, me dieron dinero y me despedí de ellos.
 
Me bajé del barco y cogí un autobús que me llevaba a San Antonio Abad; una vez llegado, me bajé del autobús y miré al cielo y dije: Yahvé, ayúdame.
 
¿Tú qué crees?, pues me llamó la atención un chaval y me dijo: ¿Buscas trabajo?
 
Y le contesté que sí, que buscaba trabajo y le pregunté si podía ayudarme y me dijo que en aquel hotel de *** tenedores hacía falta un ayudante de cocina y me fuera hacia allá…
 
 
 
Este hotel estaba en Ibiza, me recibieron bien, me hice amigo de un ayudante como yo; o sea que yo también era ayudante, parece una broma pero para llegar a ayudante de cocina hay que estar dos años trabajando, el amigo se llamaba Burgos y luego este amigo y yo nos volvimos a ver en La Legión y nos lo pasábamos bomba…
 
A los seis meses de estar en La Legión me volví un rebelde y fumaba tabaco y bebía ginebra. Me pasaba una semana haciendo guardias y dos meses en el pelotón de castigo por rebelde y los voluntarios eran los que me tenían por un amigo pero golfo.
 
Mi amigo Coli que era un caballero me invitaba a bocadillo y té y me iba con él, pero yo pensaba de otra manera, o sea, no me iban las lúmix
No sé qué más contaros, perdonarme…
Y fui desertor, o sea, Misionero sin frontera.
Beny
 
 

domingo, 24 de marzo de 2013

 

"El pozo del tío Raimundo", por Beny

 
 

Una sección de Beny en exclusiva para The Adversiter Chronicle
 De animalis
Los animales domésticos y salvajes tienen sentido común, no ridículo que los domésticos no atacan a nadie.
Los animales salvajes atacan a otros animales y les comen la carne como sucede al ñu y el antílope africano.
 Quiero que sepáis que los animales acuáticos son de sangre fría.
El tiburón tiene pánico a las orcas y éstas a su vez tienen miedo a las ballenas gigantes.
 
Hay tortugas de 1000 y 500 años.
Hay un animal reptil en la India que es muy peligroso, escupe veneno a los ojos y es muy difícil de capturar y al que le escupe se queda ciego.
 
Me acuerdo de pequeño que me gustaba ir detrás de las gallinas o cuando la gallina tenía polluelos le quitaba uno y la   madre corría detrás de mí.
 
Hay una cantante llamada Ángela Carrasco que es guapísima y algo novia de Camilo VI...

 
Y como os iba diciendo, yo y mi primo Jaime íbamos a la Braña y montábamos a los caballos y nos divertíamos de un lado a otro.

 
En la biblioteca escribo sobre la religión; mis favoritos son Abraham y Sara.
Beny